La obra de Julia Creuheras se despliega como artefactos cinéticos que aluden a reliquias misteriosas y polvorientas que atesoran la incertidumbre. Son desmanteladores activos de las fuerzas ocultas que mueven lo ordinario, máquinas que intentan envolver el tiempo en una forma circular mediante la repetición absoluta del movimiento. (tic-tac-tacón).

La investigación artística de Julia aborda la mecánica cuántica y su papel en la ruptura y la perpetuación irónica del statu quo. Teje telas y prendas no sólo para alegorizar sobre la Teoría de las Cuerdas, sino para acercarse a los cuerpos. Esta teoría afirma que, a nivel subatómico, lo que llamamos partículas son en realidad estados vibratorios, similares a filamentos que vibran. Explica que la realidad se constituye de cuerdas vibrantes entrelazadas. Por ello, el tejido en su obra alegoriza la textura entretejida de la realidad para dar forma a un cuerpo onírico de Quantumn. Un cuerpo cuyos hilos están hilados por la nostalgia de la cultura pop.

Mientras va a la deriva por las calles de su ciudad, Barcelona, Creuheras ve un gran conjunto de engranajes que chirrían y también encajan. Movimientos repetitivos en una cadencia hipnótica. Cuerdas invisibles que tiran y se sueltan, que se contraen y se despliegan de muchas maneras moviendo el mundo de lo ordinario. Estas cuerdas son fuerzas de poder, deseo y fisicalidad. Son el combustible de una gran máquina llamada ciudad. (santos motores-luces borrosas de la ciudad).

Estas fuerzas, son una enmarañada red lingüística de microrrelatos que mueven y definen la materia y su significado en lo mundano, no son visibles a los ojos, como tampoco lo es ninguna de las fuerzas que mueven y asignan los cuerpos en el espacio, como la gravedad; pero constituyen la propia materia prima como una y la misma. Y lo mismo ocurre en sus Máquinas. Por eso, los engranajes y los motores encargados de insuflarles vida están deliberadamente ocultos y aquí son sólo un eco, un leve sonido o una fina cuerda que nos recuerda que detrás de toda esa magia siempre hay un truco, y que detrás de cada uno de ellos hay miles de significados que lo activan para el mundo.